En el octavo capítulo de la Casa del Dragón tocó despedir a un personaje bastante especial. Se relata la muerte del rey Viserys Targaryen. El personaje ha sido interpretado por el actor Paddy Considine (1973). Este monarca, según la historia, fue el sucesor del gran rey Jaehaerys. Al inicio de la serie, se indica que señala al poder por un Consejo que decide quien debe llevar la corona, pues los hijos varones de Jaehaerys habían fallecido.
Viserys se presenta como un personaje muy humano: sus imperfecciones lo tornan interesante. Como rey, todos lo acusa de no tener temple ni carácter, pero se las ingenia para negociar, para mantener las cosas en paz. No es un guerrero, no es un hombre de acción, pero tiene algo de lo que adolecen todos los demás personajes: ama con sinceridad. No tiene la malicia de un rey, pues emana cierta bondad que le impide imponerse como rey.
El modelo de Shakespeare: en memoria del rey Lear
Una de las obras más conocidas de Shakespeare es el Rey Lear. En esa obra, el viejo monarca divide el poder entre sus tres hijas, sin darse cuenta que debía confiar esa sucesión a Cordelia, su hija de mejor y bondadoso corazón. Es el tema del rey trágico y la herencia del poder. Todo esto reaparece en el caso de Viseryrs I Targaryen, quien en su decrepitud y enfermedad rememora mucho al Lear shakesperiano.
Al igual que un personaje de Shakespeare, el rey Viserys parece tener un destino trágico. No puede tener un hijo varón con su primera esposa, Aemma. Sus conflictos con su hermano, nombrar sucesora a su hija y cada una de sus decisiones parecen encaminadas a un final de malos resultados. Pero es tan humano, tan real, que a todos conmueve su personalidad.
¿Qué otros personajes se parecen al Viserys de la Casa del Dragón?
Basta con revisar la historia y toparnos con el recuerdo de Claudio, aquel emperador romano que era viejo y cojo. Recibía burlas de todos en la corte, pero al final fue un buen gobernante que mantuvo en imperio en paz. Sin embargo, su final fue trágico.
Tal vez, sea en el mundo del cine donde hallemos otra analogía. Se trate de Vito Corleone, el personaje medular de la película “El Padrino” (1972). El viejo “rey de la mafia” empieza a flaquear. Sabe que su hijo mayor, Santino, no es el mejor para capitanear a la “familia”. No obstante, Santino asume el mando y muere asesinado, sin sospechar de una trampa de sus enemigos. Entonces; el viejo Vito le da el poder a su hijo menor, Michael, saltando en el orden de sucesión a Fredo. Igualmente, Vito sabe que el esposo de su hija (Carlo) es cómplice de sus rivales, pero decide ponerse una venda en los ojos para mantener “la paz en la familia”.
Del mismo que Vito se “hace el desentendido” con los problemas de su familia, el rey Viserys decide ignorar que sus nietos no son hijos de un matrimonio ilegítimo. También, deja pasar los conflictos entre Alicent Higtower y su hija Rhaenyra Targaryen. Todos estos asuntos quedan latentes a su muerte y son el detonante de la “Danza de los Dragones”.